194
Ungió los pies.
María de Betania,
de Jesucristo
193
No puedo correr
por culpa de los
años,
que me consumen.
192
Descansaré
en tu grácil regazo
¡Oh musa mía!
191
Llegó contigo
la gota de rocío
de la mañana.
190
Ellos triunfaron,
y yo también triunfé,
pero más tarde.
189
Alfombra mágica,
de mis primeros años.
Viajé contigo.
188
Cuando te vayas,
pesadilla siniestra,
no vuelvas más.
187
Pesan los años
como lingotes de
plomo,
como mis pecados.
186
¡Cómo se apaga,
lentamente, la luz
que me da vida!