CÁNTAME
Canta tu canción
más preciosa, vida,
cuando triste yo
esté
con el alma de
pena adormecida
sin ánimo y sin fe.
Canta para mí,
amada fascinante,
esa dulce canción
que aleja la
tristeza de tu amante
y colma de ilusión
su vida de
perenne trashumante.
¡Oh luz, oh
bendito hado!
Sedentario ya,
oyendo tu brillante
canción embelesado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario