eBay

lunes, 31 de enero de 2022

ARROYO

 

ARROYO

 

 

 

En el límpido y diminuto arroyo que  nutre de vivificante agua mi ignota y plácida covacha de  sueños poéticos, has saciado tu sed, dama imaginaria, y has bañado tu impoluto cuerpo cual lo hiciera Eva en el jardín  del Edén, cual inocencia infantil, hasta que la serpiente la hizo pecar.

Nunca te he acompañado.

Ni nunca te acompañaré.

Porque ese riachuelo es sólo tuyo,

nutriente del jardín que me provee de las flores

que cuando me visitas te ofrendo generosamente

para que goces de su perfume,

y para que engalanes tus cabellos

de catarata ruidosa.

Allí se bañan en jolgorio los pajarillos.

¡Si los oyeras cantar su libertad!

Te conoce el arroyo, dama de exquisita ternura,

pues cuando vas a disfrutar de su don vivificador,

aunque esté escuálido, un no sé qué lo convierte en caudaloso,

en ágil, en abundante, en bullicioso.

Dichoso ese arroyo, mujer imaginaria,

que puede juguetear en todo tu cuerpo caprichosamente.

 

domingo, 30 de enero de 2022

GRIAL

 

GRIAL

 

Un día de luminosa locura, de beatífica paz, de eucarística mansedumbre, de silencio conventual y de mirífica religiosidad, tomé, con exquisita suavidad, mi obsoleta y raída vestimenta de peregrino, pretendí, amada de todos los tiempos, de todas las circunstancias y de todas mis vicisitudes y flaquezas, emprender un largo viaje que me llevaría a los más recónditos e ignorados lugares de la tierra, y que concluiría con el hallazgo, en una remota aldea cuyo nombre nunca indagué, como tampoco su exacta o aproximada ubicación.

¿Qué me llevó hasta allí, renunciando al encanto de tu melodiosa voz, a la ternura sin límites de tu regazo, a la frescura temblorosa de tus labios, a la suavidad imantada de tu dúctil cabellera, al brillo deslumbrante de tus ojos y al aroma hechizante de tu cuerpo todo? ¡Ay, amada! En mi locura fascinante quería sorber vino en la sagrada copa donde Jesús, El Hijo del Hombre, brindó por última vez con sus discípulos, uno de los cuales, Judas Iscariote, lo entregó a sus enemigos por treinta miserables monedas. Y lo hice, ¿sabes? y con el vino que libé se abrió para mí toda la sabiduría del mundo y mi espiritualidad recibió el don de la abundancia  y dejé de ser débil y comprendí que para acceder a la felicidad sin fronteras ni barreras hipócritas tenía que regar cada día, con agua pura de manantial, las flores de mi locura.

sábado, 29 de enero de 2022

ENCANTAMIENTO

 

ENCANTAMIENTO

 

 

Desde que te conocí, amada, hace un milenio, quedé prendado del primor de tu rostro, iluminado de risa, de tus delicadas manos que sostuve amorosamente entre las mías, y de tu sabia ingenuidad de niño y de muchacha campesina.

Desde que te conocí, amada, hace un milenio, engalané de la alegría que me ofrendaste a mi tristeza alienante, colmé de confort los ruinosos cimientos de mi covacha y adorné de multicolores luces las flores de mi jardín, que antes de conocerte eran mustias y apagadas.

Desde que te conocí, amada, hace un milenio, quedé encantado de tu porte señorial, de tu ternura, de la frescura de tu cuerpo, de la entonación musical de tu voz, de la humedad sensual de tus labios y del prodigio de tus ojos.

¡Oh encantamiento romántico, que has traído vigor a mi vida, has sembrado de esperanza mis alocados proyectos y has alfombrado de amor la tierra que pisan tus pies y los míos!

 

 

 

viernes, 28 de enero de 2022

FANTASMAS I

 

FANTASMAS I

 

 

Me aterrorizan, amada, los fantasmas de la noche porque me trasladan, sin mi anuencia, a momentos de mi atormentada vida que no quiero recordar por horripilantes, desgraciados e infelices.

¿Cómo hago, amada, para borrar de mi angustiada mente estos recuerdos horribles  que al vivenciarlos en los sueños se convierten en terribles pesadillas y que sólo son abatidos, tras desigual lucha, con el despertar que demora un siglo en sacarme del fuego infernal de esos seres terribles?

Ningún sortilegio, amada, ha podido librarme de esos fantasmas que inexorablemente esperan, como el cazador a su presa, como el mar al río que devorará o como el  caballo que para vencer la adversidad esperaba un rey para cambiarlo por su trono, para atraparme en sus redes y llevarme a vivenciar oníricamente, con inevitable frecuencia, terribles instantes pasados que hirieron con saña indescriptible mi tierna carne de entonces y mis sentimientos rodeados de pureza e inocencia.

¿Acaso, amada, mis pecados fueron tantos y tan terribles  para que los azotes que recibí por ellos en tiempo real no fueron suficientes y tenga que expiarlos en los sueños que deberían ser plácidos y no tormentosos?

jueves, 27 de enero de 2022

MANANTIAL

 

MANANTIAL

 

 

Nunca se secará, amada, ese manantial de doble vertiente que nuestro pródigo amor hizo brotar en tu alma y en la mía, para que nos sirviera de espejo natural y único, para que viéramos reflejada en la pureza de su agua el fulgor de las estrellas y para saciar nuestra sed.

No languidecerá  ese manantial, amada, porque su agua es prodigiosa y cada sorbo de ella, al extraerse, se multiplica con el amor que tú le transmites y con el amor que yo le transmito.

¡Manantial de amor que brotó de las entrañas de la tierra para sumir nuestras almas en inmenso placer!

Manantial benigno que apaga la sed de los ariscos y preciosos pajarillos que pagan con su cántico múltiple la porción de agua que consumen para seguir siendo dueños del etéreo espacio y de verde flora.

Manantial benévolo que das vidas a las flores del jardín de mi covacha de sueños.

 

miércoles, 26 de enero de 2022

EPITAFIO

 

EPITAFIO

                                                             

 

Con tu menuda y bien trazada letra, amada, deberás escribir en la lápida que colocarás en mi humilde tumba de olvidado de la fortuna material el siguiente

 

EPITAFIO:

 

-Aquí yace mi amado, el marabalero que quiso ser poeta, radiotécnico y doctor; el que amó a Platero, el frágil y cariñoso confidente de Juan Ramón Jiménez; a Chico Carlo, el amigo de la infancia de Juana de Ibarbourou; al Principito que encontró Antoine de Saint Exupery en el desierto y luego idealizó; a Selma, la eterna amante de “Alas  rotas”, de Gibran Khalil Gibran y a la poesía mirífica de Gabriela Mistral; el que admiró a Salvador Allende y sintió repulsa por el sátrapa Augusto Pinochet; el que galopó en los caballos de mar del poeta Francisco Lárez Granado y el que siempre hizo lo que no programó.

 

martes, 25 de enero de 2022

AMOR

 

AMOR

Para Arelis

 

Incansable viajero, tenaz orfebre de ilusiones fugaces, poeta de dolorido canto, debí cabalgar muchas lunas en mi raudo potro de ensueño buscándote en el reducido contorno de un universo que sólo existe en la infinita excelsitud de la imaginación y en el sencillo gesto de la ingenuidad.

Y cuando al fin cesó mi búsqueda, porque te presentaste sin la galantería de la espera, envuelta en violáceo traje, esplendente como el simbolismo de la cómplice tarde, y risueña cual el rostro de la inocencia infantil, desapareciste fugazmente, al igual que la estrella de mirífico cielo y que la silvestre planta de la flor del camino, donde tantas veces apoyé mi cansado cuerpo, luego de agotadora jornada.

Y como ahora sé que existes, que no eres la imagen incorpórea de un sueño tiernamente construido, aunque inalcanzable, porque mi potro ha envejecido, mi voz se ha quebrado y la luz de mis ojos es ahora apenas leve resplandor, he regresado a lo cotidiano, a lo simple, porque tu recuerdo, amada, la seguridad de tu existencia, han obrado el milagro de reconciliarme con la vida, voluble, hasta tu fugaz aparición.

¡Cómo quise que en vez de fugaz tu presencia hubiese sido eterna¡ Habríamos ido, ¿verdad?, a llevarle flores a Amal con la pequeña Sudha, y guiados por El Principito emprendido lírico viaje, cargados de libros, hacia todos los confines de la tierra para leerles cuentos a los niños y enriquecer el maravilloso mundo de la imaginación infantil.

lunes, 24 de enero de 2022

AMISTAD

 

AMISTAD

A Nelys Antonia

           

 

Mi minúsculo jardín de la amistad, amada increíble, ya casi mustio por la carencia angustiosa del agua nutricia, amaneció con un rosal amarillo, resplandeciente cual el sol de la mañana, gracias al rocío bucólico que vino de las agradables montañas de Tunapuy y de la ruidosa urbe carupanera que años ha, cuando era apenas la única referencia de ciudad conocida en mi lejana adolescencia, fue testigo muda de mis penas, que eran muchas, y de mis alegrías, muy escasas.

¿Será este rosal, amada paciente y querendona, tan voluble como las flores silvestres que nacían y morían en mi infancia con la aparición del sol y la inevitable llegada de la luna y su cargamento de duendes que sólo existían en mi mente, entonces cándida cual la sonrisa de los niños y el canto angelical de los pajarillos ariscos que huían al acercármeles, o durará acaso,  como la siempreviva o como el río que nunca se cansa de derramar su regalo de agua, fuente de vida?

Dime, amada, como lo has hecho en  otras  situaciones de incertidumbre, qué debo hacer para que ese rosal permanezca siempre en mi jardín ofrendándome su belleza, bendiciéndome con su color amarillo, saludándome con su luminosa mudez y recordándome el don de la gratitud.

-Esa rosa, amado, para que nunca languidezca, deberá recibir agua nutricia, además del manantial nuestro, que le sirve de espejo a los luceros, de las manos que sembraron la planta que le dio vida.

Por mí, amada, ese regalo de la naturaleza a mi minúsculo jardín resplandecerá por siempre, pues le prodigaré singular cuidado  al rosal que le dio vida para que sea fuerte como el roble, el hierro o la piedra.

¿Tú me ayudarás, amada idílica, a combatir el paso del tiempo con la ternura que le prodigaré?

¿La prodigiosa mano que plantó el rosal tendrá la perseverancia para que esa flor nunca se marchite?

 

 

domingo, 23 de enero de 2022

NAVE

 

NAVE

 

 

 

Cuando parta, di, amada, en mi frágil y gris ceniza nave, díscola como yo, y sin brújula que oriente su incierto rumbo, ¿dejarás que mis salobres y caudalosas lágrimas bañen tu regazo y que el agua pura de mis besos, titilantes cual toda la piel angélica de tu cuerpo, calmen la sed de tus labios de doncella impoluta?

Dime, amada, ¿en cada barca que arribe a tu puerto presumirás mi llegada, a sabiendas de mi incierto regreso y de que en otros puertos encontraré muchos amores, tal vez más impetuosos que el tuyo y más perennes y cercanos?

Mi barca, amada, tal vez regrese pronto a tu puerto de esperanza sin límites, o quizás zozobre en las profundidades de un furioso mar o pierda el rumbo y nunca más encuentre la ruta lumínica que me devuelva a tu litoral de aguas apacibles y azules.

¿Aun así, amada, me esperarás?

.

 

 

sábado, 22 de enero de 2022

RÍO

 

RÍO

 

 

 

 

De no haber sido por el río, amada, y el delicioso rumor de sus aguas al pasar, raudas, por el camino de piedras blanquecinas y grisáceas arenas que recorre constantemente sin cansarse ni proferir una queja de inconformidad, mi infancia primero, y después mi adolescencia, habrían sido insulsas, monótonas, tediosas y carentes de atractivos capaces de conformar, inequívocamente, que fui niño y adolescente. ¡Así de impactante fue el río y su disfrute pleno en los primeros años de mi vida, cuando no tenía consciencia de que biológicamente el hombre pasaba por diferentes etapas y geográficamente mi mundo se circunscribía a Marabal, el caserío que me vio nacer, e Irapa, que entonces, para diferenciarlo del campo, denominábamos el pueblo, y donde por primera vez admiré, sin palparlo, la grandeza del mar y conocí el cementerio!

Pasaba en el río todo el tiempo que me era posible, y en sus cristalinas, saludables y amistosas aguas aprendí a soñar despierto y a creerme dueño de su diminuto tesoro alimentario: guabinas, guaraguaras, querepes, camarones y cangrejos. Flotaba sobre la apacible corriente, con los ojos cerrados, y me entregaba a ella inocentemente hasta la llegada de la noche, cuando los grillos, con su monótona sinfonía, se dejaban oír.

 

 

viernes, 21 de enero de 2022

YOMO

 

YOMO

 

Esa mano prodigiosa, amada, que plantó un rosal en mi diminuto jardín de la amistad, también me ayudó a impedir que Yomo, ese exquisito personaje de mi infortunada infancia que me espantaba los duendes y me contaba cuentos que nunca vi impresos en ningún libro, permaneciera más tiempo sumergido en el anonimato.

Esos cuentos, amada perdurable, debieron haber sido inventados por Yomo, quien no sabía leer ni escribir, pero tenía una imaginación que ni tú ni yo poseemos, al final tenían una moraleja. Sí, amada, uno de ellos, según mi avejentado recuerdo, hacía referencia a un viajero que al saciar su sed en la fuente generosa del camino, en vez de darle gracias como hacen los aborígenes de muchas latitudes primitivas, escupió el agua y al regreso tuvo que sorber su saliva con el líquido elemento, ya no límpida como antes, sino asquerosa.

¿La moraleja de este cuento? No  puedes  escupir hacia el cielo porque la saliva caerá te caerá en el  cuerpo. Si ensucias el agua que sació tu sed, en vez de bendecirla como hacen los aborígenes de muchas tribus primitivas de lejanas latitudes, tendrás que sorberla mugrosa al regreso del viaje.

Yomo, amada cariñosa, me enseñó una manera peculiar de contar: una, dona, tena, catona…¿De dónde obtuvo estos conocimientos? Nunca lo supe, porque aparte de su generosidad y amabilidad hacia mi persona y de su afición al ron blanco, que lo sumergía en la embriaguez, nada más recuerdo de él.

Yo creo, amada esplendorosa, que Yomo debe estar cabalgando en el cielo en un burrito marabalero, cual lo hacía el poeta Juan Ramón Jiménez en Platero el borriquillo moguereño que viajó con él a la eternidad.

Allí lo encontraré, amada gentil, y volveré a escuchar sus cuentos y él escuchará los míos.

Y en los prados del cielo, deleitaremos a los ángeles y nos olvidaremos de duendes, de tristezas, de penurias existenciales, de pleitos.

¿Verdad que sí, Yomo?

¿Verdad que sí, amada ideal?

¿Verdad, amada, que ahora Yomo cabalgará conmigo hacia la posteridad en mi obra literaria?

 

 

 

jueves, 20 de enero de 2022

PRODIGIO

 

PRODIGIO

 

Un beso tuyo, niña mía, en los labios, en la mejilla o en la sien, aunque a distancia, aleja de mi avejentado cuerpo la tristeza más grande que me embargue, la dolencia más fuerte que me aqueje y la necesidad de amor que me acongoje.

Una sonrisa tuya, niña mía, presencial o virtual, me hace sentir, en cada porción de mi cansado cuerpo,  el poder prodigioso del amor, capaz de vencer una tormenta, un huracán e insuflarle vida a una piedra.

El roce de tus delicadas manos, por mi frente, niña mía, cuando el fuego de la fiebre me hace delirar y el dolor de mi encanecida cabeza me atormenta y me hace sufrir a niveles insoportable, opera el prodigio de la sanidad.

Tu mimosidad, niña mía, cuando mi inspiración se amotina y no quiere derramar sobre el papel blanco cual mi mente las palabras perfectas que les proporcionen vida al poema, al cuento o a la epístola, vencen los obstáculos que los mantienen prisioneros y emanan prodigiosos textos a caudales.

¡Prodigiosa niña primaveral que iluminas mi ocaso!

 

 

 

 

 

miércoles, 19 de enero de 2022

GÜICHA

 

 

GÜICHA 

 

Llenaste de belleza, amiga siempre en lugar predilecto de mi añejo corazón,  los primeros años de mi atormentada vida.

Tú, como yo, sentiste en tu debilucho cuerpo el dolor de la perversidad de tu madrastra, mala en grado sumo, que cual el hada mala de los cuentos que por primera vez me sumergieron en el mundo de lo maravilloso contigo, sonreía siniestramente. de su crueldad.

Sufriste, Güicha, estoicamente, el fuego horrible que brotaba de su boca, parecido a los de los dragones,  personajes malos de los cuentos que leí porque tú me los prestabas, pero no le diste el gusto de que gozara con las lágrimas que ella esperaba que surgieran de tus ojos, producto del maltrato, ni gritaste, ni pediste auxilio.

Fuiste rebelde ante la adversidad, compañera de juegos interminables, inductora de mis primeras lecturas.

Por ti, amiga de mis primeros años, conocí al “Patito Feo”, a “Aladino y la lámpara maravillosa”, “Simbad el marino”, a “Alí Babá y los 40 ladrones”, a “Blanca Nieves”, a “Pulgarcita”, a “Cenicienta” y muchos otros personajes que en mi ingenuidad campesina creí reales.

Tú, amiga inolvidable, buscaste auxilio en la doctrina cristiana y te internaste en un convento.

Allí te vi por última vez.

¿Dónde estás, Güicha?

Sé, porque palpé tu bondad en esos terribles primeros años nuestros, que en cualquier lugar del mundo donde te encuentres, estarás prodigando el bien.

Sé que no hay odio en tu corazón.

Y si estás en los prados del Señor,  cabalgas con los ángeles en un brioso caballo etéreo, parecido al de los cuentos que leí por ti.

 

 

 

martes, 18 de enero de 2022

REGALOS

 

REGALOS

 

Me pediste agua, bien mío, y te regalé un aljibe de agua purísima, como la Virgen María, sin pecado concebida, como la mirada de la inocencia, que en la noche servía de espejos a miríadas de luceros.

Me pediste un beso, corazón mío soñado, y bese amorosamente cada segmento sensible al amor de tu juvenil cuerpo perfumado de rosas, mirtos y claveles de canela.

Me pediste que te llevara al campo y te conduje, en el carruaje de mi imaginación,

al pueblecito que me vio nacer, entonces tan sano como un mango recién agarrado de la mata, como el limón que da vida, como la guayabita madura.

 

lunes, 17 de enero de 2022

SENSACIONES

 

SENSACIONES

 

 

Aunque me separe de ti, bien mío, un millón de millas o una centuria, tengo la sensación gratificante de que estás junto a mí y de que ambos somos primavera u otoño, luz de una misma fuente de energía y fuego de la misma estufa, de carbón o eléctrica.

Tengo la sensación de tu presencia, bien mío,  en tu aroma,  único,  que se adhiere como el agua al río, el silencio a la soledad y la sombra a la penumbra, en cada diminuto espacio de mi covacha de sueños, en cada capullo de rosa que se abre para mostrar su belleza íntima, en cada cántaro donde has libado vino, en el paisaje natural que hemos disfrutado juntos y en el canto de los pájaros al levantarse con la aurora y al acostarse con el crepúsculo.

Tengo la sensación de tu compañía, bien mío, aunque tu orilla esté distante de la mía, en los sueños, cuando duermo plácidamente; en los poemas que he escrito para que solamente tú los leas y en los gratos recuerdos de la felicidad que me has obsequiado para que la tristeza no se aloje en mí.

¡Sensaciones, bien que me  insuflan vida!

¡Sensaciones que me alertan, bien mío, de que en ésta o en otra vida, resplandecerá nuestro amor en mi covacha de sueños!

 

Etiquetas

¡CHÁVEZ VIVE! ¡DESPIERTA ¡HIPÓCRITAS! ¡MUERAN LOS DICTADORES! A la muerte de Hugo Chavez ABRACITOS ABRÁZAME ABRAZOS ABUNDANCIA ALFONSINA AMANTE AMAR AMORÍOS ARROYO AYUDA BESAR BESO BIPOLAR BOLÍVAR CALANDRIA CANTO AL MARISCAL SUCRE CASTÍGALOS SEÑOR CAUTIVERIO CHAFAROTE CHÁVEZ CLARIDAD CORAJE CORAZÓN COVACHA II Cumbre Energetica DEMOCRACIA DEMONIOS DESMAYO DESVARÍOS DICHAS Dichtung Dictadura en Venezuela DONES EL DIABLO CHÁVEZ El Sayón de Sabaneta ELEGÍA A PASTORA HERDUGO ENCALLADO ENCANTAMIENTO ESPERA… FANFARRONERÍA FANTASMAS I FE FRAGANCIA FURIA Gelidez GENERALES GENERALES 2 GENERALES 3 GRATITUD HEROÍNAS ILÍMITE IMÁGENES IMPERDONABLE INMIGRANTE LATIR LEVÁNTAME LIBERTAD LLANURA MARÍA CONCHITA ALONSO MARÍA. MOSAICO LÍRICO MOSAICO LÍRICO 10 MOSAICO LÍRICO 2 MOSAICO LÍRICO 3 MOSAICO LÍRICO 4 MOSAICO LÍRICO 5 MOSAICO LÍRICO 6 MOSAICO LÍRICO 7 MOSAICO LÍRICO 8 MOSAICO LÍRICO 9 NECESARIA EXPLICACIÓN NECROLATRIA NECROLATRÍA OJOS SINIESTROS PAN PATRIA PAYASITA PAZ PERDÓNALOS SEÑOR PETICIONES Petrocaribe PLATERO Poemario POEMAS MÍSTICOS Poesia POESÍA Poesia contra la Dictadura Chavista Poesia Politica de Venezuela Poesia Politica de Venezuela contra la Dictadura Chavista Poésie Poetas Venezolanos Poetry Poetry Publishers Poetry Websites PREGUNTA PRESENTIMIENTO Publishing Poetry QUERERES REPULSIÓN I REPULSIÓN II RÍO ROSAS RUISEÑOR SABERES SACRILEGIO SENSACIONES SI FUERA JOVEN SÍGUEME SIMÓN BOLÍVAR! SONETILLO LXXVIII SONETILLO XLVII SONETILLO XXIX SONETILLO XXIX A Nelson Mandela SONETILLO XXXI SONETILLO XXXII SOÑEMOS SORPRESA Submit Poetry SUMERSIÓN SÚPLICA TARDANZA TIRANO TIRANO II TRISTEZA TROVADOR Venezuelan Political Poetry against Dictatorship por Rodulfo Gonzalez VERGEL VIOLETAS VÍSTETE поэзия

Poemario de Eladio Rodulfo

Poemario de Eladio Rodulfo
Poemario de Eladio Rodulfo

Recomendado